Perrunillas

Preparamos los ingredientes.

Ponemos en un bol la manteca y el anís y los mezclamos bien.

Le añadimos 2 huevos enteros y 2 yemas, así como el azúcar, y lo batimos bien con ayuda de unas varillas eléctricas.

Cuando esté bien batido añadimos la ralladura del limón y seguimos batiendo.

Añadimos la harina mezclada con la levadura poco a poco y seguimos batiendo.

Una vez que esté todo incorporado retiramos las varillas y utilizamos las manos para seguir amasando.

Aunque te haya indicado que se usa medio kilo de harina dependerá del tamaño de los huevos y de la humedad que absorba la harina. En este caso tuve que usar un poco más de harina hasta conseguir que la masa no se me pegara a las manos y quedara separada del bol.

Batimos 1 clara bien fría a punto de nieve.

Batimos la otra clara hasta que quede simplemente espumosa.

Colocamos un trozo de la masa en una tabla y la extendemos con las manos hasta que tenga un grosor de 1 centímetro, más o menos.

Con un cortapastas vamos haciendo redondeles.

Que queden bien separados.

Con la yema del dedo índice le hacemos una huella en el centro de la perrunilla y, con un pincel de cocina, las pintamos con la clara espumada.

Con ayuda de una cuchara de café le ponemos un moñito de clara montada en la huella.

Ponemos azúcar abundante en un plato llano.

Cogemos las perrunillas, una a una, y las pasamos rápidamente sobre el azúcar por el lado pintado y las colocamos en una bandeja sobre papel de horno.

El horno debe estar bien caliente (a máxima potencia). Las ponemos a hornear de 20 a 25 minutos dependiendo de la potencia de tu horno procurando que queden sólo doradas.

Dejamos enfriar las perrunillas y el mejor sistema para conservarlas es en un bote de cristal...

...o en una lata hermética, aunque el hermetismo de la lata en mi casa no sirve para nada ya que se las comen volando…

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