Cortar seis rebanadas de pan del día anterior...
... y ponerlas a freír en un caldero mediano con 3 cucharadas de aceite de oliva...
... hasta que queden bien doradas. Las retiramos y reservamos.
Pelamos y laminamos los dientes de ajo...
... y los ponemos en la misma olla añadiendo otra cucharada de aceite de oliva hasta que estén dorados.
Añadimos el pimentón y sobre la marcha el caldo de pollo...
... y volvemos a meter las rebanadas de pan frito al caldero.
Dejamos hervir a fuego bajo durante unos 20 minutos, tras los que retiramos el caldero del fuego.
Ahora machacamos con la minipimer para trocear bien el pan y sazonamos al gusto.
Mientras esté todo caliente rompemos un huevo sobre un colador y meneamos bien para que caiga el huevo colado sobre el guiso y que queden trozos pequeños de huevo.
Removemos bien para mezclar todos los ingredientes.
La sopa de ajo está lista para comer.
Si la sirves en un recipiente que mantenga el calor quedara incluso más buena.