Pelamos las manzanas.
En una sartén ponemos a derretir la mantequilla.
Mientras, vamos cortando las manzanas en trocitos pequeños.
Añadimos la ralladura del limón, el palito de canela y la vaina de vainilla que habremos abierto para que suelte todo su sabor.
Añadimos las manzanas cortaditas a la sartén.
Agregamos el azúcar,
removemos bien y añadimos el zumo del limón.
Dejamos que rehogue a fuego moderado removiendo con suavidad para que no se nos quede un puré de manzanas dado que están cortadas muy pequeñas.
Una vez rehogadas las manzanas...
...las ponemos a escurrir en un colador para desechar el exceso de líquidos ya que al colocarlas sobre la masa de hojaldre si están muy húmedas la masa se quedará muy blanda.
Precalentamos el horno a 180ºC.
Partimos la masa de hojaldre por la mitad y en una de las mitades ponemos el relleno,
dejando un margen para pintar con clara de huevo y sellar el hojaldre.
Tapamos el hojaldre con la otra mitad...
...y ayudándonos de un tenedor sellamos los bordes.
Pintamos la superficie del hojaldre con la yema de huevo.
Si la yema estuviera muy densa puedes añadirle unas gotas de agua que te ayudará a pintar con más facilidad.
Metemos en el horno durante 15 - 20 minutos dependiendo del tipo de horno hasta que esté doradito.
Sacamos del horno y dejamos enfriar.
En un bol mezclamos las cucharadas de mermelada de melocotón junto con el vasito de licor...
...removiendo todo bien para luego pintar la superficie del hojaldre.
Introducimos en la nevera unas horas. Está lista para comer.