Preparamos todos los ingredientes para que nos sea más fácil su elaboración.
Pelamos y troceamos las manzanas quitándoles el corazón, las introducimos en un caldero añadiéndoles el palito de canela y el azúcar moreno,
las cubrimos ligeramente con agua y las dejamos cocer comprobando que estén tiernas pero no rotas.
Las ponemos a escurrir y las reservamos.
Por otro lado en un bol colocamos la harina, la mantequilla y el azúcar...
... y con las manos haremos una mezcla para la cobertura.
Cuando las manzanas estén templadas las introducimos en un molde con papel de horno, para poderlas desmoldar con más facilidad...
... y ponemos la mezcla de cobertura sobre las manzanas.
Habremos precalentado el horno e introducimos el molde en el horno a una temperatura de 180ºC durante unos 15 – 20 minutos hasta que se dore la cobertura vigilando para que no se queme.
Listo para comer.
En este caso lo acompañé con un helado de vainilla...
... aunque también puedes ponerle el sabor que más te guste o un poco de nata montada.
Insisto, fácil y riquísimo. ¡A disfrutar del crujiente de manzana!