Para empezar la elaboración necesitamos tener preparados unos moldes en forma de cono o cucuruchos.

Si dispones de moldes metálicos el problema está resuelto, pero no es estrictamente necesario a menos que los uses a menudo.

Puedes fabricarte unos moldes caseros usando cartulina que debes envolver con papel de aluminio para evitar que se queme.

Una segunda opción es utilizar los cucuruchos para los helados envolviéndolos también con papel de aluminio.

Estiramos la lámina del hojaldre en la mesa y cortamos tiras de unos 2.5 cm de ancho...

... y con ellas vamos envolviendo el molde para cono empezando por la parte más estrecha hasta llegar a cubrirlo por completo.

A continuación pintamos los conos con huevo batido ayudándonos con una brocha de cocina y los vamos poniendo en una bandeja de horno sobre papel de hornear.

Precalentamos el horno a 200ºC y metemos la bandeja con los conos en el horno y los horneamos durante 15 – 20 minutos hasta que los veamos doraditos.

Los sacamos del horno...

... y todavía en caliente retiramos los moldes, que saldrán rápidamente.

Dejamos que los conos enfríen mientras preparamos el relleno.

He utilizado para el relleno 500 mililitros de crema pastelera hecha al microondas que dividí en dos partes.

La mitad de la crema...

... la metí en una manga pastelera.

Derretí el chocolate negro al microondas e hice una ganache añadiéndole la mantequilla...

... y la vertí en la otra mitad de la crema pastelera...

... mezclándolos bien con ayuda de una lengua...

... para meterlo también en otra manga pastelera.

Puedes guardar ambas preparaciones en la nevera hasta que vayas a rellenar los conos.

Cuando vayamos a rellenar los conos los sacamos del recipiente donde los hayamos guardado...

... y los vamos rellenando con la crema pastelera...

... o con el chocolate.

Ponemos los conos rellenos en la bandeja de presentación...

... y los espolvoreamos con azúcar glass.

¡Los conos de hojaldre rellenos con crema pastelera están listos para comer!

Ten cuidado con los ratones que pululan por la cocina porque los conos pueden desaparecer con rapidez.

Si te gusta la nata también podrías rellenarlos montando la nata y azucarándola.