Lavamos bien la coliflor, le cortamos los tallos gordos dejando los arbolitos y los ponemos a cocer, en esta ocasión los hice al vapor.
Mientras se cuece preparamos una bechamel.
Para ello ponemos la mantequilla a derretir en un caldero.
Cuando esté derretida le echamos de golpe la harina y mezclamos bien usando unas varillas manuales hasta conseguir una Roux rubia.
Le añadimos la leche caliente de golpe y seguimos removiendo con las varillas a fuego moderado hasta que espese.
Cuando empiece a tomar cuerpo añadimos las pimientas molidas, la nuez moscada rallada y la sal.
Troceamos el lacón,
se lo añadimos a la bechamel y removemos.
En una bandeja apta para horno colocamos la coliflor ya hecha...
... y volcamos sobre ella toda la bechamel.
Precalentamos el horno a máxima potencia y una vez caliente encendemos el gratinador.
Espolvoreamos la coliflor con queso parmesano rallado al gusto y la metemos en el horno a gratinar controlando para que no se nos queme.
Una vez doradita la sacamos del horno.
En mi caso acompañé la coliflor gratinada con lacón con unos filetes de secreto ibérico a la plancha simplemente salpimentados.