En un vaso de minipimer ponemos la cabeza de ajos pelados y enteros, el tomillo, el laurel, el orégano, el pimentón y el trozo de pimienta picante (en Canarias, de la 'PM', que va a gusto según el grado de picante que quieras ponerle). Añadimos un chorro de vinagre.

Lo trituramos todo bien añadiéndole un poco de sal gruesa y poco a poco el aceite de oliva. Hay que tener en cuenta que siempre es una parte de vinagre por tres de aceite.

Colocamos el cabrito en un recipiente y lo salamos.

A continuación ponemos el adobo por encima y dejamos macerar, si es posible de un día para otro y si no unas 4 ó 5 horitas.

Una vez macerado ponemos en una sartén aceite de oliva.

Freimos aconsejando que quede bien fritito, colocando los trozos en un caldero.

El resto del adobo que nos queda lo pasamos a la sartén, lo hervimos unos minutos y lo incorporamos al caldero con el cabrito. Todo ello lo ponemos a hervir, a fuego lento, durante unos 10 minutos. Listo para servir.

Se puede acompañar con unas papas arrugadas o papas sancochadas.