Empezamos la elaboración preparando un caramelo dorado y para ello ponemos en un cazo al fuego el medio vaso de agua con las cinco cucharadas de azúcar.
Después de 10 – 15 minutos al fuego, al ir aumentando la temperatura y sin dejar de burbujear, empezará a dorar el caramelo y dejamos que continúe la cocción hasta que esté a nuestro gusto.
En este caso deseaba sólo un caramelo rubio y por eso, cuando estuvo a mi gusto...
... lo retiré del fuego y lo vertí en la flanera.
Te aconsejo que prepares el caramelo justo antes de meter la crema flanera en el molde, para que el caramelo no se enfríe y quede cristalizado.
Para preparar el flan separamos las claras de las yemas de los cinco huevos.
Ponemos las cinco yemas de huevo en un bol grande y le agregamos cinco cucharadas de azúcar blanco...
... mezclándolos bien con unas varillas manuales.
A continuación vertemos la leche condensada, la leche evaporada y la cucharadita de extracto de vainilla...
... mezclándolos con las varillas manuales.
Incorporamos el queso crema ligeramente troceado...
... y utilizamos una minipimer para batirlos y mezclar bien hasta que tengamos toda la mezcla integrada.
Lo siguiente es batir las claras a punto de nieve...
... y la agregamos a la mezcla en varias porciones...
... mezclándola con movimientos envolventes hasta que tengamos una mezcla homogénea.
Vertemos toda la mezcla del flan en la flanera sobre el caramelo.
El flan se puede cocer al horno utilizando el baño María pero necesita estar horneando al menos una hora y yo prefiero hacerlo en la olla exprés que es mucho más rápido.
Ponemos en el fondo de la olla exprés un par de hojas de papel de cocina, ponemos agua hasta llegar a la mitad de altura de la flanera (en este caso puse 4 centímetros de agua) y luego metemos la flanera bien cerrada,
cerramos la olla exprés y cocinamos a fuego vivo durante 15 minutos, para continuar a fuego medio otros 20 minutos.
Es decir, 35 minutos en total.
Finalizado el tiempo separamos la olla del fuego y cuando se haya despresurizado la abrimos y sacamos la flanera.
La podemos abrir para confirmar que la cocción ha sido óptima pinchándola con un palito.
Volvemos a cerrar la flanera y la dejamos enfriar por completo para luego meterla en la nevera y tenerla refrigerando varias horas.
En casa solemos hacer este tipo de flan el día anterior y lo dejamos refrigerando toda la noche.
Pasado el tiempo lo desmoldamos sin dificultad poniendo el plato de presentación encima de la flanera, dándole la vuelta para volcarlo.
Solo falta cortarlo en porciones y servir tu flan Napolitano.