Empezamos la elaboración poniendo en un bol el azúcar moreno y la mantequilla en pomada y las batimos con varillas eléctricas durante varios minutos hasta que estén bien mezcladas.

Batimos ligeramente los huevos y los añadimos a la mezcla...

... y continuamos batiendo hasta tenerlos integrados.

En otro bol tamizamos la harina, la levadura y el cacao en polvo...

... mezclándolos con una cucharita...

... para luego ir añadiéndolo, poco a poco, a la mezcla anterior incorporándolo inicialmente con una espátula.

Cortamos en cuadraditos el chocolate negro con un cuchillo...

... y lo vamos añadiendo a la mezcla anterior intentando repartirlo bien por toda la mezcla.

Una vez que tengamos una bola homogénea vamos cogiendo porciones de masa para bolearlas.

Para ello te aconsejo que te impregnes la palma de la mano y las yemas de los dedos con un poco de aceite y cojas las porciones con una cuchara, las vayas boleando y las vayas colocando en una bandeja de horno cubierta con papel de horno, dejándolas bien separadas.

Ponemos un poquitín de sal Maldon en un platillo...

... y cogemos porciones con dos dedos y espolvoreamos las bolitas de masa.

Precalentamos el horno y metemos la bandeja a hornear a 180ºC y las tenemos horneando unos 12 minutos.

Pasado el tiempo y cuando veas la superficie de las galletas craquelada sácalas del horno aunque estén blandas porque luego endurecerán.

Pásalas de la bandeja de horno a una rejilla para que terminen de enfriar.

Luego sepáralas del papel con una espátula o un cuchillo y ponlas en el plato de presentación.