Empezamos la elaboración dorando la carne enharinada.
Para ello salamos los filetes de ternera y los enharinamos usando el truco de la bolsa para no manchar. Retiramos el exceso de harina y los ponemos en una sartén con aceite de oliva caliente...
... dándoles la vuelta cuando hayan dorado ligeramente por una de las caras.
Cuando estén dorados los reservamos en un plato para continuar el guiso.
Pelamos la zanahoria, dos dientes de ajo y la cebolla y los cortamos en cuadraditos pequeños al igual que la ramita de apio.
En una olla exprés usando el aceite de haber pasado los filetes para aprovechar el sabor que dejó la carne agregamos las verduras picaditas hasta que estén ligeramente pochadas.
Preparamos un vaso de vermut rojo...
... y lo vertemos a la olla con una pizca de pimienta negra molida.
Dejamos unos minutos evaporando el alcohol para luego agregar los filetes de ternera que teníamos reservados, los dos tomates pelados y triturados y un par de vasos de caldo de carne.
Cerramos la olla exprés y tenemos todo cociendo unos 15 minutos desde que empieza a sonar a fuego alto.
Aprovechamos el tiempo para saltear las setas y, para ello, en la misma sartén donde doramos la carne ponemos a dorar los otros dos dientes de ajo picaditos.
Cuando empiecen a dorar añadimos las setas dejándolas saltear de cinco a ocho minutos.
A la par preparamos la guarnición, en este caso utilicé mijo, un cereal pequeñito muy fácil de cocinar.
Lo ponemos a cocer en agua hirviendo con un poco de sal gorda durante unos 12 – 13 minutos.
Pasado el tiempo lo escurrimos y está listo para comer.
En mi caso le vertí un chorrito de aceite de oliva cruda y nos hojitas de perejil fresco picadito mezclándolo todo bien.
Pasado el tiempo de cocción abrimos la olla exprés cuando se haya despresurizado y comprobamos la cocción de la carne.
Incorporamos al guiso las setas salteadas, mezclamos con cuidado para no romper la carne y dejamos cociendo todo junto unos minutos con la olla abierta.
Al servirlo espolvoreamos por encima las hojitas de perejil picadas al gusto.
Tu fricandó al vermut está listo para comer.
Pon al lado el mijo para que se utilice como guarnición.