Preparamos los ingredientes.
Rallamos los dos calabacines sin pelar...
... y la cebolla...
... y los ponemos a escurrir en un colador.
Cuando estén escurridos los ponemos en un bol amplio y los mezclamos.
Troceamos el jamón York y el queso Cheddar en cuadraditos pequeños...
... y los añadimos al bol.
Batimos los huevos como para tortilla...
... y los agregamos al bol al igual que el aceite de girasol mezclando bien los ingredientes.
Ahora vamos añadiendo la harina tamizada poco a poco y mezclamos bien.
Por último salpimentamos.
Engrasamos bien un molde cuadrado y le ponemos papel de horno y vertemos toda la mezcla.
Metemos en horno precalentado a 180ºC durante 35 – 40 minutos. Comprobamos que está hecho pinchando con un palito hasta que salga limpio, y evitando que se queme.
Sacamos del horno y dejamos reposar unos minutos.
Los cortamos en cuadrados y este pastel de calabacín está listo para comer.
En este caso lo acompañamos con pechugas de pollo empanadas.