Preparamos los ingredientes.
Sacamos la ralladura de la lima y reservamos.
Poner en remojo con agua fría las 3 láminas de gelatina.
Pelamos y cortamos las mangas y las rociamos con el zumo de media lima...
... las introducimos en un vaso americano...
... y las trituramos.
En 1 bol ponemos el resto de ingredientes (yogures, mascarpone, azúcar moreno, jengibre molido y la ralladura de lima)...
... y los batimos usando unas varillas manuales hasta que se integren todos los ingredientes.
Escurrimos bien la gelatina y le damos un golpe de 30 segundos en el microondas para que se disuelva.
La volcamos sobre el puré de mangas y volvemos a batir unos segundos.
Incorporamos el puré de mangas sobre la mezcla del resto de ingredientes y mezclamos bien.
Volcamos sobre los vasos y metemos unas horas, o mejor de un día para otro, en la nevera.
Una hora antes de consumir añadimos azúcar por encima y con ayuda de un soplete la caramelizamos.
Volvemos a introducir en la nevera hasta el momento de comer.
Pon las raciones de crema de mango caramelizada a buen recaudo porque... ¡desaparecen como por arte de magia!