Empezamos poniendo en un bol la harina de trigo tamizada con la cucharadita de sal y la cucharadita de pimentón mezclando dichos ingredientes con una cucharita.
Batimos la yema y el huevo entero y lo incorporamos al bol mezclando dichos ingredientes.
Agregamos la cucharada de orégano...
... que integramos, para luego incorporar la mantequilla en pomada...
... y finalmente el queso Parmesano rallado...
... amasando bien todos los ingredientes hasta tener una bola de masa bien integrada...
... que tapamos con film refrigerándola durante media hora.
Pasado el tiempo sacamos la masa de la nevera dividiéndola en dos, estirando cada una de las mitades entre dos hojas de papel de horno, con ayuda de un rodillo, dándole una forma ovalada y un grosor de 3 – 4 milímetros.
Con un cuchillo o con un cortapastas cortamos porciones de tamaño parecido...
... que colocamos en una bandeja de horno, sobre papel de hornear, un poco separados entre sí.
Espolvoreamos un poco de orégano por encima de los palitos pasándoles un dedo por encima para que se quede adherido a los mismos.
Metemos en el horno precalentado a 180ºC horneándolos hasta que empiecen a dorar y al tocarlos los veamos cocidos y crujientes proceso que durará entre veinte y veinticinco minutos.
Entonces los sacamos del horno y los dejamos atemperar sobre una rejilla.
Tus palitos de queso parmesano y pimentón están listos para comer.